Elevación de seno maxilar: cuándo se necesita y cómo es el procedimiento

La elevación de seno maxilar es una cirugía dental que permite aumentar la cantidad de hueso en el maxilar superior para facilitar la colocación de implantes dentales. Este procedimiento es común en odontología y cirugía maxilofacial, especialmente en pacientes que han perdido hueso debido a la extracción de piezas dentales, enfermedades periodontales o la reabsorción natural del hueso.


¿Qué es el seno maxilar?

El seno maxilar es una cavidad de aire situada en los huesos maxilares, justo debajo de los ojos. Entre sus funciones están reducir el peso del cráneo, humidificar el aire inhalado y aportar resonancia a la voz.

Cuando se pierden dientes en la zona posterior del maxilar, el hueso tiende a reabsorberse, lo que dificulta la colocación de implantes dentales. Aquí es donde entra en juego la elevación de seno maxilar.


¿Cuándo es necesaria una elevación de seno maxilar?

Este procedimiento se recomienda en los siguientes casos:

  • Pérdida de dientes en el sector posterior del maxilar superior.
  • Altura ósea insuficiente para la colocación segura de implantes dentales.
  • Enfermedades periodontales u otras condiciones que provocaron pérdida de hueso.

Procedimiento de elevación de seno maxilar

El proceso quirúrgico suele seguir estos pasos:

  1. Consulta inicial y diagnóstico: mediante radiografías o tomografía se evalúa el hueso disponible.
  2. Anestesia local o general, según la complejidad del caso.
  3. Incisión en la encía para acceder al hueso maxilar.
  4. Levantamiento de la membrana sinusal, creando espacio para el injerto.
  5. Colocación del injerto óseo, que puede provenir del propio paciente, de un donante o de materiales sintéticos.
  6. Cierre y sutura, con seguimiento postoperatorio para controlar la evolución.

Recuperación tras la cirugía

  • Tiempo de sanación: entre 4 y 12 meses, dependiendo de la cantidad de injerto y la salud del paciente.
  • Síntomas comunes: dolor leve, inflamación o molestias, controlados con analgésicos.
  • Cuidados postoperatorios: seguir las indicaciones del cirujano, que pueden incluir antibióticos, enjuagues y dieta blanda.

Riesgos y complicaciones posibles

Aunque la elevación de seno maxilar es un procedimiento seguro, pueden presentarse complicaciones como:

  • Infección en el área tratada.
  • Sangrado durante o después de la cirugía.
  • Ruptura de la membrana sinusal.
  • Rechazo del injerto óseo (poco frecuente).

Alternativas a la elevación de seno maxilar

Si este procedimiento no es viable, el dentista puede recomendar:

  • Implantes dentales cortos, que no requieren tanta altura ósea.
  • Regeneración ósea guiada, estimulando el crecimiento del hueso.
  • Tratamiento de ortodoncia, para reposicionar dientes y crear espacio para implantes.

Conclusión

La elevación de seno maxilar es una cirugía eficaz y segura que permite a muchos pacientes recuperar su sonrisa mediante implantes dentales, incluso cuando hay pérdida ósea en el maxilar superior. Una correcta evaluación, planificación y seguimiento son claves para garantizar el éxito a largo plazo del tratamiento.